lunes, 27 de marzo de 2017

QUIERO VOLVER A SER YO



Yo siempre he sido una persona súper fuerte y decidida. Cuando he necesitado hacer acopio de mi fuerza de voluntad, lo he conseguido, y me siento muy orgullosa de mí misma en muchos momentos de mi vida, porque he sido capaz de esforzarme en muchos temas, por muy difíciles que fueran o por mucho que me costasen. Y ahora me veo tan floja!!. El otro día, el impulso de organizar mi mente y mis propósitos se quedó en eso, en un impulso… Cogí carrerilla para empezar y al rato me detuve de nuevo. A penas me duró un par de horas, el resto del tiempo, me sentía agotada y lo dediqué a mirar videos de cortometrajes, consultar foros en Internet y organizar la música de la sala de espera. Después me fui a dar un paseo por el barrio donde trabajo, porque me sentía asfixiada, comí en un banco de un parque, me tomé un café en mi terraza favorita del barrio, y volví al despacho con el tiempo casi justo para empezar a trabajar. Con lo cual, no volví a retomar la tarea para la que me había venido al despacho desde temprano. Hoy vuelvo a tener el mismo impulso, más que nada porque la necesidad y la urgencia siguen estando ahí, y quiero coger las riendas de la situación lo antes posible. Veremos qué pasa a lo largo del día…

jueves, 23 de marzo de 2017

ORGANIZANDO MI CABEZA


Hoy me estoy haciendo el ánimo de organizar un poco mi cabeza y mis objetivos para los próximos meses. Creo que con una buena planificación y algo de motivación, lo puedo conseguir. Ya he hecho la lista de propósitos y ahora lo que tengo que hacer es escribir sobre ellos e ir tomando decisiones y elaborando pautas. Es una tarea que hago constantemente conmigo misma y con muchos de mis pacientes. No desarrollo tampoco un método muy elaborado, e incluso cada vez lo hago de una forma distinta y voy improvisando recursos, pero siempre hay algunos elementos comunes. Escribir es uno de ellos, porque yo aclaro muchísimo mi mente cuando veo las cosas por escrito. Quizá por eso me gusta tanto leer también, porque la información escrita me resulta mucho más fácil de comprender y de seguir que si me hablaran directamente. Tengo la mañana por delante. En un principio me iba a quedar en casa esta mañana, porque estoy bastante resfriada, afónica, me duele la cabeza… Estoy así desde el Martes por la tarde, que empezó a dolerme el pecho y la garganta. Mejoro un poco durante el día, pero las últimas horas de la tarde son mortales y me encuentro bastante agotada, con fiebre y mareos. Llevo dos noches acostándome sin cenar porque no tengo fuerzas ni para eso, llego a casa, me pongo mi pinchazo de heparina y me meto en la cama. Pero hoy prefería venirme al despacho y aprovechar esta mañana en mí misma. Cada vez disfruto más de estos momentos a solas, es como mi oportunidad de centrar mi mente, reflexionar, llorar si es necesario. La soledad y el silencio me reconfortan, y no sé por qué. Soy consciente de que haciendo esto pierdo energía, que no me ayuda a estar activa y espabilada. Pero mi cuerpo y mi mente me piden relax, lentitud, calma, oscuridad (pero de la reconfortante…), porque eso es lo que me ayuda a pensar. Puede parecer un estado algo deprimido, melancólico, pasivo. Pero a mí me hace bien.

Y mis propósitos giran alrededor de estos temas: productividad laboral, página Web y publicidad, manejo del ordenador, ejercicio físico, control de la alimentación, pérdida de peso, control del tiempo, meditación, descanso, maternidad, y mejora de mi actitud general. Estas son las cosas sobre las que tengo que pensar y tomar pequeñas decisiones.

Algunos días después de que nos dijeran que teníamos que cancelar la transferencia de nuestro bebé, me propuse intentar que todo esto no me arrastrara, porque me veía un poco al límite. Me compuse un calendario con los 54 días que tenía por delante, colorido y llamativo, para que me motivase un poco. No va a ser fácil. No está siendo fácil… Quiero poderme centrar en otras cosas y apartar la maternidad de mi mente, pero después de haberlo tenido tan cerca otra vez, créeme que no es tan sencillo. Lo que está claro es que en los próximos 54 días, no tiene sentido estar dándole muchas vueltas a esto, porque no puedo hacer nada. Salvo tomarme la pastilla anticonceptiva y pincharme la heparina. Y ni si quiera tengo la certeza de que después mi bebé vuelva a estar cerca de mí, porque primero mi endometrio tiene que responder adecuadamente. Quiero poder pensar en mi cuerpo como algo bueno, y mandar buenas vibraciones a mi endometrio y mi sistema reproductor, pero estoy todavía en proceso de deshacerme de la rabia y el rencor.

martes, 21 de marzo de 2017

ANIVERSARIO DE NOVIOS



Hoy es nuestro Aniversario de Novios, hace 21 años que Goku y yo empezamos a salir juntos, justo después de unas Fallas. 21 años es mucho tiempo, es más de la mitad de nuestra vida!!!!. Hemos pasado de todo en estos años, como podrás imaginar. Pero hoy siento que nuestra relación es más fuerte que nunca, más intensa que en muchas otras épocas. Yo creía que siempre había tenido muy claros mis sentimientos hacia él, pero en estos últimos años, con todo lo que nos está pasando, he sido consciente todavía más de lo mucho que quiero a mi marido, y de lo mucho que le necesito en mi vida, porque sin él, no podría con todas estas cosas. No diría tampoco que tengo la relación perfecta, porque en otras cosas, me gustaría que fuera diferente, y en algunos momentos, Goku me saca de mis casillas, pero en lo importante, y en lo básico, yo sé que es mi alma gemela, y que no podría estar con nadie más, ni con nadie con quien me complementase tanto como con él.

Voy empezando a darme cuenta de que algunos de mis problemas más recientes, pueden estar relacionados con el tiempo que le dedico al ordenador. Yo no diría que tengo una fuerte adicción, creo que incluso menos de lo que veo en otras personas, si me comparo con el resto, pero aún así siento que tampoco estoy teniendo una relación sana con la tecnología, me parece que es algo que interfiere bastante en que pueda organizar mejor mi tiempo. Es momento de pararme y pensar cómo afronto este conflicto, qué puedo hacer.

lunes, 20 de marzo de 2017

Y OTRA VEZ ESPERANDO


Fallas pasadas. Ni bien ni mal. Sólo he salido un par de días, primero con un par de amigos, y al día siguiente con otras dos amigas. Ambos días me lo he pasado muy bien, me encanta la ciudad de Valencia en Fallas, sus colores, su ambiente, la gente, las calles cortadas, los olores de buñuelos y pólvora. Me ha venido muy bien para despejarme un poco. Más que sentirme apagada o bloqueada como días atrás, lo que noto últimamente es bastante ansiedad, sobre todo porque me encuentro irritable, molesta con todo, acelerada en casi todas las cosas que hago. Me tengo que parar en muchos momentos a coger aire profundamente, como si necesitara cargar los pulmones constantemente y las cosas me estuvieran costando mucho esfuerzo. Sigo haciéndome el propósito de ser capaz de esperar estos meses sin que la vida pase sin más. Procuro seguir con mis planes y hacer otros nuevos, que vayan ocupando este tiempo.

No sé en qué momento estará todo listo para mi próxima transferencia. Ya he aprendido que no se puede hacer planes ni estimar las cosas, porque luego, cualquier pequeño suceso echa al traste toda planificación. No me queda otra que soportar la espera. Hay tres objetivos que quiero poder conseguir en este tiempo también, además de estar entretenida con actividades: EJERCICIO FISICO – PERDIDA DE PESO – MEDITACION.

Sobre el ejercicio físico. Hace meses que no me muevo casi nada a este nivel. Lo más aproximado que hago al ejercicio es ir a la china en bici o a darme alguna vuelta por Valencia. Y ni si quiera todos los días. Tiendo más al sedentarismo. Pero yo creo que es por dos motivos, porque estoy cansada y algo deprimida, y porque no tengo hábito. Quiero poder compaginar la bici (cogerla un poco más), con algún tipo de ejercicio más aeróbico. Me encanta bailar y había pensado hacer clases de zumba. Personalmente me es muy difícil apuntarme a ninguna clase física, pero estoy segura que una pequeña exploración por Youtube me daría muchas ideas. Sólo me hace falta organizarme.

Sobre la pérdida de peso. Ay madre, si es que mi alimentación es un desastre!. No estoy cumpliendo para nada con este tema. Es que no lo consigo. Y cada vez va a peor y yo cada vez me siento peor. Ya he llegado a los 60 kilos… Y no soy tan alta como para que este incremento no se note. Es mucho peso. Necesito hacer algo. Quiero el cuerpo que me gusta, el que sé que puedo tener. Pero como cuesta esfuerzo, lo voy posponiendo, porque bastante me estoy teniendo que esforzar en otras muchas cosas como para añadir más sacrificios en mi vida. En realidad es algo que creo que no me costaría tanto llevar a cabo, digamos, en ejecución. Lo que peor llevo siempre en este tema es organizarme adecuadamente. Si tuviera planificada cada comida con todos sus ingredientes claros y “a mano”, sé que no me costaría tanto cumplir. Pero elaborar una dieta me cuesta, y prepararla me cuesta todavía más, porque en el momento que me falla algún ingrediente, ya tengo que empezar a improvisar o cambiar cosas y al final todo se me desmonta. Quizá no haga falta tenerlo todo tan controlado, soy consciente, pero yo intuyo que mi fallo está ahí, en esa falta de control.

Sobre la meditación. De las tres cosas, esta es la que más atiendo, pero aún así, me gustaría elaborarla un poquito mejor. Me sirven para meditar sobre todo, los paseos al sol, y la música. Son cosas que hago constantemente. Pero quizá lo que siento que necesito en este aspecto es conseguir profundizar más y mejor. Ya que tengo esta facilidad, podría explotarla más y soy consciente de que me quedo muy a mitad de camino.

jueves, 9 de marzo de 2017

CANCELAMOS TRANSFERENCIA



Mi bebé vuelve a alejarse de mí… Al menos durante un tiempo. ¡¡Qué frustrante es todo esto!!. Yo ya no sé de dónde sacar paciencia y fuerzas. Me agoto en la espera, en la incertidumbre de cada pequeño paso. Siempre que pensamos que ya nada malo puede ocurrir, aparece algo nuevo, otro imprevisto más. Y encima esta vez no se trata de esperar poco, sino por lo menos 3 meses. ¡¡¡3 meses!!!, en este momento se me antoja casi toda una vida. La cantidad de cosas que pueden pasar durante todo ese tiempo… Parece que estoy predestinada a sufrir en este tema, parece que la vida se está riendo de mí al ponerme tan al alcance a mi bebé y quitármelo de un plumazo en el último momento. Todos mis planes, todos los cambios que estaba haciendo para organizar mejor el tiempo, el trabajo, las responsabilidades, todo a la mierda. Me encuentro con 3 meses por delante en los que no sé cómo enfocar mi vida. Supongo que en unos días veré las cosas de modo distinto y podré recuperar algo de energía y de positivismo. Sé que encontraré la manera de seguir adelante, porque siempre lo hago. Pero ahora mismo vuelvo a estar hundida, anestesiada, bloqueada y sin ganas de nada.

Goku, que es maravilloso, hace muchos esfuerzos para que me encuentre bien y me anime. Debe de estar igual que yo o peor, pero como me ve tan mal, saca fuerzas de cualquier lado y se vuelca conmigo. Qué afortunada me siento, qué persona más bonita tengo en mi vida para que me acompañe en el dolor. El otro día me dijo: mi vida ha tenido hasta ahora dos partes, una sin ti, y otra contigo. La que he vivido contigo ha sido con diferencia la más feliz de mi vida, y habrá una tercera donde ya no estemos solos tú y yo, y también será muy feliz, pero por ahora no me importa alargar un poquito más esta segunda parte y aprovechar este tiempo contigo, como siempre hemos estado, tú y yo, con nuestras cosas, nuestras rutinas y actividades, juntos. Y tiene razón. Siempre hemos estado muy bien los dos solos, nos entendemos a la perfección, y disfrutamos mucho de nuestro tiempo juntos. Cuando tengamos a nuestro bebé todo esto cambiará bastante, aunque no del todo, pero está claro que será diferente. Y no nos importa, es lo que queremos. Pero tampoco viene mal que podamos centrarnos un poquito más de tiempo en nosotros dos y veamos este parón como algo que puede ser positivo.

lunes, 6 de marzo de 2017

SIENTO QUE VOY A EXPLOTAR



En la ecografía que tuvimos el Viernes pasado, las cosas fueron un poco regular. Me han vuelto a subir la medicación porque el grosor de mi endometrio sigue avanzando muy despacio, más despacio de lo recomendable (ese día sólo medía 4 mm). Puede ser normal puesto que no contamos con mi ciclo natural, estoy en pre-menopausia, tengo casi 40 años, y mi respuesta endometrial nunca ha sido muy alta. Pero por ahora es muy baja y si en la próxima ecografía no ha subido lo suficiente (que la tenemos mañana), tendremos que cancelar la transferencia y esperar a un mejor ciclo. Tengo que llegar por lo menos a 8 mm, aunque lo ideal es que el endometrio se encuentre entre 10-11 mm, pero con 8, ya seguiríamos adelante, porque en el anterior embarazo tuve 8 y todo salió a la perfección en cuanto a implantación y agarre del embrión. Así que me encuentro un poco nerviosa frente a esto. Y lo peor de todo es que no puedo hacer absolutamente nada, sólo confiar en que la medicación funcione y mi cuerpo responda bien.