miércoles, 29 de junio de 2016

PRIMERO TENGO QUE ESCUCHARME



Yo voy a hacer todo lo posible por salir de aquí, por encontrarme mejor. Pero primero tengo que escucharme. Cada persona tiene su forma de gestionar sus emociones. Pocas veces me he visto tan superada por algo en mi vida, pero es que nunca había perdido un bebé, nunca había luchado tanto por una ilusión. A lo mejor he tenido hasta ahora una vida demasiado fácil. Puede ser. Seguramente con los años, recordaré esta etapa con mucha más comprensión, o a lo mejor me río de mí misma con el tiempo, o a lo mejor me doy cuenta de que estaba en un error y debería haber hecho las cosas de otra manera, no lo sé. Pero después de todos estos días pensando y reflexionando, creo que estoy haciendo lo mejor en este preciso instante. Cuando una decisión tranquiliza, es que va por el buen camino. Y yo estoy más tranquila.

El único obstáculo que me queda por superar es Goku, tengo que hablar con él, todavía  tenemos pendiente parte de esta conversación. Le quiero tanto que necesito que apruebe todo lo que decido hacer antes de hacerlo, porque no quiero hacerle sufrir. Suelo guardarme tanto las cosas para mí misma que no dejo ver a los demás lo mal que estoy, y yo creo que él pensaba que yo estaba llevando mejor la situación. No dudaría nunca de su amor ni de lo mucho que se preocupa por mí, y que quiere ayudarme siempre. Y a veces, encontrar la forma de ayudar a otra persona es muy complicado, porque primero hay que escucharla, y quizá yo le he abordado con todo esto sin avisar y sin darle demasiado tiempo para escuchar ni para pensar.

No puedo evitar ser tan compleja en mis pensamientos, en mi mente, y en mi fondo. Dejo que muy poca gente se acerque a cómo soy por dentro, porque sé que cuando lo hago, pocas personas consiguen comprender y la mayoría se pierden en ese fondo tan complicado.

lunes, 27 de junio de 2016

CONVERSACION 1



Yo no sé hablar de mis cosas y mis agobios sin echarme a llorar, y muchas veces, ponerme así, hace que no consiga hacerme entender, porque arrastro mucho a la otra persona con ese sufrimiento, y yo misma me altero más de lo debido. No lo puedo evitar, soy muy sensible. Pero era importante para mí poder hablar con Goku sobre cómo estoy. El Viernes por la noche decidimos salir a cenar a uno de nuestros Restaurantes favoritos. Me preguntó si quería que habláramos, y en ese momento me sentía bastante animada para hacerlo, porque hasta ese instante me sentía un poco más ligera y aliviada, por haberme atrevido a dar el paso de hablar con él y contarle cómo estoy. Es evidente que en muchas cosas no pensamos igual, pero necesitaba tener esta conversación con él y sincerarme. Ya buscaremos soluciones.

martes, 21 de junio de 2016

ASÍ ERA MI BEBE



Es curioso cómo absorbe toda mi energía, todo mi tiempo y todo mi pensamiento, el tema de mi embarazo. Es que no me motiva nada más. Goku y mi bebé son las dos únicas cosas que me ilusionan en la vida en este momento, las dos únicas cosas que hacen que yo sea feliz. A Goku lo tengo al 100%, pero a mi bebé no. Yo no sabía que el instinto maternal era tan doloroso, es como una necesidad extrema de ser madre, sin que nada más importe en el mundo más que eso. Quiero pensar que cuando sea madre, se me pasará esta obsesión, y podré recuperar todas mis motivaciones naturales, todas las ilusiones y la actitud optimista y activa que siempre he tenido, y que ahora están detenidas. Conseguir ser mamá es lo único que ahora puede hacer que yo sea feliz, y si lo piensas francamente, eso es algo muy triste… Porque yo creo que soy más cosas que una mamá (frustrada, pero mamá ya soy al fin y al cabo). Es como si hubiera perdido parte de mí con todo este proceso, como si me hubiera transformado en algo que no me gusta ser, porque me limita cuando yo siempre he tenido miles de cosas en mi horizonte.

Como hoy sólo tengo una paciente a las 18:00, he estado súper relajada casi toda la mañana. Por lo menos hasta que me he metido en Facebook y ha pasado algo que me ha hecho sentir muy mal y he tenido un pequeño bajón de mi estado de ánimo… Tengo una amiga que es muy activa en temas de “pro-vida” y defensa de los bebés y los embarazos, y en contra del aborto, que ha colgado una foto que me ha tenido impactada toda la mañana y sin dejar de llorar. Se trataba de un embrión de 10 semanas. 10 semanas… Justo 10 semanas… Las mismas que tenía mi bebé cuando murió. Y no he sido capaz de soportar esa visión, que todavía llevo clavada en mi retina. Ella compartía esa fotografía como una forma de concienciar de que en un feto de 10 semanas hay VIDA, que está formado y que es un ser humano. Pero a mí me ha destrozado por dentro, y no he conseguido sobreponerme todavía al impacto. Es que así era mi niña… Así de pequeñita. Así de bonita, y así de formadita. Aunque desconozco cómo sería su apariencia real en el momento del aborto, porque si no se estaba formando bien, a lo mejor no se parecería a la de la fotografía. Pero me da igual. En mi mente, ese bebé existe en alguna parte, y donde quiera que esté, tiene esencia, tiene alma y yo me reencontraré con ella cuando llegue el momento, puesto que pude tenerla dentro de mí durante 10 maravillosas semanas.

lunes, 20 de junio de 2016

PEQUEÑA USUL



USUL. Así se va a llamar nuestro proyecto actual de ser papás. El nombre viene de un libro de nuestra juventud que se llama “DUNE”. Así es como llama a Paul Atreides (el protagonista), su chica (Chani), que pertenece al pueblo de los Arrakis, y es el nombre que elige cuando lo adoptan en su tribu. Simplemente nos gusta cómo suena, tampoco hay que buscarle ningún paralelismo ni interpretación. De entre todos los que Goku ha estado proponiendo, desde luego es el que más me ha gustado a mí. Así que, USUL… Es corto, sonoro, tiene fuerza, y eso me gusta. Porque así quiero que sea mi futuro bebé. Me desagrada un poco el hecho de que suene más masculino que femenino, y a la vista de los resultados de las pruebas de Goku, tenemos un 90% de posibilidades de que nuestro bebé sea una niña. Esto se me había pasado contarlo!. En el espermiograma que le hicieron a Goku, que por cierto sale todo perfecto (ya hablaré de esto en otro momento…), se hacía referencia a que de la muestra de 200 espermatozoides que habían analizado, 180 de ellos llevaban una carga genética femenina, y por tanto, engendraría una niña antes que un niño. No me preguntes por qué, pero este dato me gustó, me dejó muy buena sensación. Yo tengo la certeza de que el bebé que perdimos era una niña, lo he pensado muchas veces.

jueves, 16 de junio de 2016

NO CONSIGO ARRANCAR


Seguir con el día a día, me cuesta. Y me cuesta mucho!. Mi mente sigue buscando desesperadamente cualquier cosa que la entretenga y evite que se ponga a pensar. Y sigo con mi tendencia a posponer todo lo que tengo que hacer y a dejar abandonadas muchas cosas que antes hacía con gusto. Mi cabeza está permanentemente recordándome todas las cosas pendientes que tengo y no hago. Las importantes, y las no tan importantes. Hoy no me quito de encima la responsabilidad de un informe que tengo que presentar para esta tarde a unos pacientes. Y lo haré, estoy segura que lo tendrán a su hora, cuando lleguen a las 17:00. Y en realidad no es nada difícil para mí, aunque me lleve un ratito hacerlo. Pero encuentro mil excusas para no ponerme con ello. Hoy me he levantado temprano y me he venido al trabajo. No tengo pacientes esta mañana, y he pensado que así me pondría las pilas mejor que si me quedo en casa. Pero ya son las 11:00, y realmente no he hecho nada productivo. ¡¡Con todas las cosas pendientes que tengo!!. Y continuo con las mil excusas. En lugar de hacerlas, he estado jugando al Candy Crush, he pasado un buen rato en Instagram, he mirado el Facebook y leído las noticias en Internet, he perdido media hora buscando la plastificadora de mi compañera (y no la he encontrado), he leído algunas entradas del foro de “Proyecto-bebé”, he buscado información sobre Iriólogos en Internet para entender qué narices es eso y por qué recurren a él algunas mujeres del foro (y para decidir después que esas cosas a mí no me van…), he almorzado, y he contestado algunos correos que tenía pendientes (quizá sea esto último lo único que estaba en la lista de cosas importantes). Todo lo demás sigue sin hacerse, a la espera, y por supuesto, revoloteando en mi cabeza sin parar… Antes no me costaba nada organizarme el tiempo para llegar a todo. Yo he sido siempre de las que acostumbraba a hacer las cosas cuanto antes para quitárselas de encima, de las que rentabilizaba el tiempo al máximo y acababa haciendo incluso más cosas de las que se proponía, muchas de ellas muy interesantes y creativas, porque ya no tenía responsabilidades en la cabeza y me podía relajar. Quiero volver a ser esa persona. La que llegaba al despacho y lo primero que hacía era escribir una lista de cosas para hacer ¡¡y la cumplía!!. Es más, ¡¡no paraba hasta que la cumplía, y no me costaba!!. Y hoy todo se me hace un mundo.

Me encantaría poder contarle todo esto a Goku. Debería tener la confianza necesaria para decirle cómo estoy, cómo me siento y todo lo que me pasa. Pero de momento no puedo. Ni sé cómo hacerlo tampoco. Son muchas las razones para ello. No quiero fallarle, ni defraudarle, y que sepa que no puedo con estas cosas. Él tiene un carácter súper trabajador, no se rinde, y normalmente yo también, pero ahora no. No sé si entendería el tipo de descanso que necesito.

También me frena decírselo, el hecho de que no quiero que se sienta mal, no quiero cargarle con más problemas a su espalda. No quiero ser la causante de que esté disgustado. Y mucho menos quiero que esté preocupado por mi bienestar. Quiero mostrarme fuerte delante de él, que sienta que puede apoyarse en mí si lo necesita. Que estoy aquí y que puede estar tranquilo. ¿Cómo voy a transmitirle todo eso si le muestro mis debilidades?. Hoy por hoy, para mí es más importante Goku que yo misma, y siento que debo continuar como sea, y que él me vea más o menos bien y más o menos entera. Cuando estoy con él intento hacer esfuerzos porque me vea lo mejor posible. Es durante la semana, cuando llego al despacho, cuando vuelvo a encontrarme fatal y hecha una mierda.

lunes, 13 de junio de 2016

FIN DE SEMANA DURO



No me preguntes por qué, pero los Lunes suelo sentir ganas de escribir. Y más especialmente cuando el fin de semana ha sido duro. Más que duro, yo diría que este fin de semana ha sido extraño. Extraño porque ha tenido una mezcla de emociones muy dispares. Porque también, por primera vez, he mentido a mi familia, porque no me apetecía estar con ellos, y les hemos dicho que teníamos un compromiso con amigos para comer el Domingo, cuando en realidad, hemos estado solos en casa, a tan sólo unos metros de ellos (estaban reunidos en casa de mis padres, que viven en la misma finca que yo…). No me siento orgullosa de ello, no me gusta hacer esto, pero no había ganas ni fuerzas por parte de ninguno de los dos, y así lo hicimos al final.

Extraño también porque encontré a Goku llorando en la cama, hundido, casi no podía ni hablar conmigo. Hasta ahora se ha estado mostrando fuerte delante de mí, quiere protegerme, quiere que me encuentre bien. Pero este Sábado se derrumbó y me dijo que desde la pérdida del bebé, él ya no es el mismo, que se nota cambiado para peor, y que siente que nunca va a ser como antes, que cree que no lo supera. Me partía el alma verle de ese modo. En esta ocasión fui yo la que intentó aparentar fortaleza delante de él, pero no siempre me sale bien. No supe ayudarle, no sabía qué decirle, porque yo me siento igual de mal, a veces creo que peor (ahora ya no estoy tan segura). Lloramos los dos, y nos intentamos recomponer lo más rápido posible, pero no hemos vuelto a hablar del asunto. Sin embargo, estos días, Goku está más alterado que de costumbre, irritable, nervioso, la mayor parte del tiempo encerrado en sí mismo, pensativo. Entiendo que debo darle su espacio, y respetar sus procesos y sus estados, y lo hago, pero me siento muy mal, me siento impotente. Le veo sufrir y me duele el corazón. No sé qué hacer para que se sienta mejor. No es justo, porque él siempre acaba encontrando la forma de ayudarme a mí, de sacarme una sonrisa, de hacerme sentir su amor, y tengo la sensación de que yo no llego a él de la misma manera. También está lo del curso dichoso que está haciendo (en qué mala hora empezó), porque hay muchos días en los que está muy tenso por sacar buenos resultados. Le quita mucho tiempo que yo creo que ahora necesita para relajarse y desconectar, y no tener más quebraderos de cabeza. Afortunadamente le queda ya menos para terminar, sólo dos exámenes más. Ni si quiera nos podemos ir de vacaciones en Junio, como siempre hemos hecho, porque tiene que estudiar. Hasta el 19 de Julio no termina, y a partir de esa fecha hay dos inconvenientes para viajar. El primero es que es temporada alta y todo estará carísimo y abarrotadísimo (por eso siempre nos vamos nosotros en Junio). Y el segundo es que no sabemos cómo vamos a estar, ojalá y suceda que me quedo embarazada y tenemos que renunciar a ir de vacaciones. Y de todas formas, si no me quedase, eso significa que tenemos que seguir con los tratamientos, y para eso necesitamos mucho dinero, y tampoco sería buen momento para hacer un viaje y gastar. Así que mira qué panorama, por lo pronto, está claro que este año nada de vacaciones!.

jueves, 9 de junio de 2016

CANCELAMOS TODO, NO TENGO FOLICULOS


¿Y ahora qué voy a hacer con este mes que me queda por delante?. Estoy perdidísima. Sólo querría acostarme y que pasara todo Junio, y estar ya en Julio, y poder empezar una FIV en condiciones. Y es que esta mañana hemos tenido que cancelar todo hasta la siguiente regla. Ayer me bajó la regla y hoy hemos ido a una ecografía vaginal, nerviosos por empezar con todo esto de una vez, y nos ha dicho la doctora que no era posible empezar nada, porque no tengo ni un solo folículo en ninguno de los ovarios, y que por tanto no había nada que estimular y que debíamos esperar a ver qué pasa en mi siguiente ciclo.

¿Y ahora qué hago?. No estaba preparada para esto. ¡¡No es justo!!. Me tengo que quedar otro mes en la línea de salida, preparada, nerviosa, expectante… Y lo peor de todo, frustrada… Y sintiendo que mi cuerpo no es mío, que hace lo que le da la gana y que está atrofiado. Ni un solo folículo, ¿cómo puede ser?, no dejo de repetirme esta pregunta todo el tiempo. ¿Por qué?... No tengo ilusión por nada en este momento. Así no es como deberían haber pasado las cosas. Hace ya más de un año que teníamos que haber sido papás, y hoy estamos más perdidos que nunca. Quiero mantener la esperanza, quiero confiar y tener ilusión en este proyecto, pero estoy cansada de caerme y pegarme golpes. Siento el cuerpo magullado y al borde del colapso. Y ya no sé de dónde sacar fuerzas.

martes, 7 de junio de 2016

PREPARADOS?, LISTOS?...


Aquí sigo a la espera de que me baje la regla. Hace ya un par de días que no tengo alta la temperatura. He leído en algunos sitios que hasta 2-3 días antes de que venga el periodo, es cuando empieza a bajar la temperatura. Eso significa que ya se está acercando. Quiero estar mentalmente preparada para cuando llegue el momento, y no tengo ni idea de qué puedo hacer. Ya no es tanto la parte técnica lo que me preocupa, pero sí la parte emocional, mucho más. Me he visto un montón de videos sobre la Fecundación in Vitro, he leído un montón de testimonios y experiencias (algunas buenas, y otras, muchas!!!, muy malas…). No quiero hacerme falsas esperanzas. Pero va a ser inevitable que las tenga, porque si no, tampoco tendría sentido lo que estoy haciendo. Me han dicho varias veces que soy baja respondedora, que mi cuerpo lo tiene muy difícil. Pero tengo que intentarlo, no puedo quedarme con la sensación de no haber luchado, sencillamente, no puedo…

Me siento como en una línea de salida hacia una meta. Agachada, con la vista al frente y cogiendo impulso. No sé si estoy mentalmente preparada para enfrentarme a uno de los retos más difíciles de mi vida. Es como entrar en otro universo, del que hasta el momento sólo he leído cosas, pero no he vivido en carne propia. Hay muchas de las cosas que he leído que están por venir y por las que no quiero tener que pasar, especialmente las psicológicas, porque para lo físico, me da igual lo que me echen, me da igual lo mal que lo pueda pasar mi cuerpo. Pero me asusta mucho más mi estado y mi motivación, mi sufrimiento personal, la desesperación de la espera, la compulsión por saber y conocer, por recoger información, el no tener ganas de hablar con nadie ni de hacer nada que no sea esperar, el hastío de mi trabajo, el no poder relajarme en las próximas semanas… (semanas, si todo sale bien, porque si no, estaríamos hablando de los próximos meses). No quiero tener que ir acumulando ilusiones rotas en mi espalda. No me siento preparada para afrontar eso. Necesito que salga bien.

Todos estos años ahorrando, por otro lado, para ver como en cuestión de un mes, desaparecen 5000 euros, y pensar que quizá no sean los primeros que tengamos que gastarnos. Ese dinero era para disfrutarlo, para tener un seguro de cara al futuro y a las vacas flacas que pudieran venir. No siempre me consuela pensar que es una inversión y que me merecerá la pena si tengo a mi bebé en mis brazos. A veces no funciona pensar así, porque hoy por hoy todavía no sé cómo va a acabar todo esto. Creo que ese argumento me puede llegar a servir en el futuro, pero no en el presente.

miércoles, 1 de junio de 2016

INTENTAREMOS FIV, CON ICSI



Hace un montón de días que no escribo. Y no es que haya pasado nada negativo, todo lo contrario, pero es que no he tenido ningunas ganas de sentarme y escribir, algo muy raro en mí, pero vamos, que ya empiezo a acostumbrarme a no entenderme siempre… Este mes de Junio va a ser bastante significativo. El Viernes pasado tuvimos la cita con CREA para establecer un tratamiento, y finalmente, hemos optado por intentar una FIV (Fecundación in Vitro), con ICSI. Nos han dicho que es muy difícil, pero desde la clínica también nos han animado a intentarlo. Así que estamos esperando que me baje la regla para empezar con el tratamiento de estimulación ovárica. No quiero hacerme muchas ilusiones, porque ya nos han dejado claro que soy lo que se llama “baja respondedora”, por mi nivel de Antimulleriana. Pero no sería la primera mujer que habrían dado por desahuciada y luego resulta que responde bien al tratamiento. Ese tratamiento es carísimo (de momento, la medicación básica nos ha costado 960 euros). Si se confirma el óvulo y me transfieren el embrión, será un poco más de dinero, porque hay otras medicaciones que tendría que empezar a tomar y que también son caras. Y la FIV nos cuesta 4000 euros. Si no funciona este ciclo, y finalmente no me transfieren ningún embrión, nos devuelven 800 euros (nos habría costado 3200 euros + 960 de medicación). Podríamos intentarlo con otro ciclo de nuevo, empezando de cero con todo y volviendo a pagar los 4000 euros y la medicación. No sé hasta cuántas veces estamos dispuestos a pasar por FIV, pero de momento no quiero planteármelo, porque prefiero centrar todas mis energías en este ciclo.

Estoy súper nerviosa. Según mis cálculos, la regla tiene que bajarme el día 9 de Junio. Tengo que llamar inmediatamente a la Clínica para que me den cita para una ecografía vaginal. Si esa ecografía sale correcta (no hay restos de ovulación ni cosas raras, y hay suficientes folículos, por lo menos más de 3), al día siguiente tengo que empezar a pincharme la medicación para estimular a mis ovarios para el siguiente ciclo y otra medicación que se supone que debe controlar mi cuerpo para que no ovule antes de tiempo. Son una serie de pinchazos que me tengo que poner en la barriga y que en teoría, cuando vaya a la ecografía me enseñaran cómo he de hacerlo. Son 6 inyecciones en principio.