Estoy que ya
no puedo con mi alma. Llevo muchos meses sin parar de tomar tratamiento hormonal.
Lo que peor llevo son los parches de Evopad, o eso me parece a mí, porque en
cuanto me los pongo, empiezo a notar que el cuerpo me arrastra, que no me
concentro en nada y me cuesta mantener la atención, y a veces incluso hasta la
mirada. Estaría tumbada la mayor parte del tiempo si pudiera. Pero yo me obligo
a activarme como sea, a salir de casa e irme al despacho, a trabajar, y si no
tengo mucho trabajo, me salgo a la calle a pasear. Lo que sea menos ceder al
impulso de acostarme, porque detesto esa imagen de mí misma, sin ser
productiva, sin atender mis responsabilidades y proyectos. Ya tendré tiempo más
delante de frenar un poco y centrarme en mi embarazo, cuando lo consiga, que lo
conseguiré…
Me hice la
resonancia magnética pélvica hace un par de semanas. Justo ese día, me notaba
la ansiedad por las nubes, pero aguanté como una campeona metida en ese tubo
minúsculo que casi no te deja respirar. Menos mal que la frente me quedaba
fuera del tubo y podía notar un poquito de aire fresco. Fue corto, unos 30
minutos, yo me esperaba bastante más tiempo, así que bien. Ya tengo los
resultados y ya los he enviado a Juana Crespo. Dentro de dos días tengo la cita
con ella, y estoy bastante nerviosa, con miles de dudas e inseguridades en mi
cabeza. El informe que me ha hecho el Hospital sobre la resonancia es perfecto,
todo sale correcto, en forma, apariencia, textura, todo está limpio y sin
alteraciones significativas. ¿Verá Juana lo mismo?. Te juro que yo estoy
deseando que encuentre algo y que por fin alguien me diga: ¡¡Aquí está!!, aquí tienes el problema, te pasa ESTO y se soluciona con
ESTO. Porque ya estoy cansada de no tener un diagnóstico claro, de ir dando
tumbos entre profesionales donde cada uno me da una versión distinta de mi
problema, pero pocas soluciones, y yo sigo sin ser mamá. He puesto siempre toda
mi confianza en cada médico a quien hemos consultado, quizá todos ellos tienen
algo de razón en parte en sus conclusiones, pero el resultado final nunca
llega. Y ahora, un informe “perfecto”, pues me da rabia…
Una chica me
contactó hace poco por Instagram, a raíz de una foto que subí y me preguntó si estaba
yendo a Juana Crespo y si quería que me metiese en un grupo que se ha creado de
otras chicas que van a esa Clínica. Le dije que sí, claro!. Me resultan muy útiles
la mayoría de las cosas que se comentan, aunque a veces hay tantos mensajes que
me resulta imposible seguir todos los hilos de conversación que se inician. Me motiva
muchísimo ver cómo otras chicas en situaciones parecidas a la mía, salen
adelante, y se quedan embarazadas. Se monta una fiesta por todo lo alto con
cada positivo. Ahora mismo somos 26 chicas, y 3 de ellas ya están embarazadas. Me
cuesta muchas veces aportar mi opinión, porque hablan de muchas cosas que yo no
controlo tanto, y en cierto modo, creo que ellas tampoco controlan, pero en algún
sitio hay que comentar aspectos de este tipo. De momento, hay dos de ellas con
quienes más he intimado, porque las 3 nos encontramos en la misma situación prácticamente,
y si puedo, prefiero hablar con ellas por privado que en el grupo, para no
marear mucho a las que están en otras fases del proceso, o con diagnósticos muy
distintos a los nuestros. Nunca he sido de formar parte de grandes grupos, me
siento mucho más cómoda en el “tú a tú”, y suelo pasar bastante desapercibida, pero
me alegro de haber encontrado éste, porque me aporta cosas muy interesantes.